martes, 27 de octubre de 2015

EL EJERCITO Y LA SEGURIDAD PUBLICA.

Aquí les hable en mi anterior articulo, de lo inusitado que era que un Secretario de la Defensa hablara en entrevistas, temas delicados de la vida nacional. Ahora quisiera referirme a varios de esos temas importantes que deseo comentar. 1. ? Debe el ejército sustituir a las policías, sean del orden municipal, estatal o federal? No contesto el General, nosotros no lo queremos, si se decidiera en una tarde, que ya no hiciéramos esa tarea, al día siguiente no habría ningún militar en las calles haciendo tareas de seguridad publica, contesto tajantemente. Lo hacemos porque es una orden del Presidente.
Ciertamente que es una instrucción presidencial, pero aparte de ser una orden. la realidad es que las policías de todos los ordenes están rebasadas y, a pesar de los exámenes de confianza, están penetradas por la corrupción del crimen organizado y común. A finales de los 90 , como senador por Baja California y Presidente dela Comisión de Gobernación, me toco coordinar los trabajos para la creación de la Policía Federal.
El objetivo era crear un nuevo cuerpo policiaco, egresado de las academias, con mayor formación, con ética y moral fortalecidas, con el propósito de poco a poco ir retirando al ejercito de las tareas de seguridad. A este cuerpo se le asignaron de entrada, mientras formaba sus cuadros, cinco mil miembros de la policía militar para que fuera la base de su crecimiento. En termino generales este esfuerzo ha sido un fracaso. A 15 años de distancia la policía federal no esta libre de corrupción, ni en las carreteras ni en el combate al crimen, algunos hechos han sido vergonzoso, como los asesinatos entre ellos en el aeropuerto internacional en junio del 2012. En Chiapas, cuando fui Ministro de Justicia, encontré que algunos jefes estaban a sueldo de los Zetas. Por eso el ejercito tiene que seguir, sustituyéndolos ahora reforzado por la Marina mexicana.No se ve pronto en el panorama mexicano que se fortalezca un cuerpo policiaco en quien la gente confíe. El tema es complejo, porque no es un problema únicamente de dinero o de salario, es un tema que tiene que ver mas con la dignidad del policía, de amor a la carrera, la cual por cierto no existe, ni existe espíritu de cuerpo.El tema de la carrera policial es fundamental.
En el ejercito cuando se egresa del colegio militar todos quieren ser algún día generales o secretario de la defensa, por eso y por la filosofía de compromiso y amor a la patria, son leales a la institución. Pero en la policía, los altos mandos son siempre de compadrazgo político, de coyuntura electoral, el agente policiaco no ve una carrera en su futuro, ni seguridad familiar y personal, de ahí que, ademas, por falta de compromiso y ética, sea presa fácil de los sobornos. 2.- El temor a un golpe de estado. Hay temor infundado de que si nos crean un orden jurídico para estar a cargo de la seguridad, no nos regresaríamos a nuestros cuarteles., sostuvo el Secretario.
Es cierto, es infundado por el origen popular del ejercito y sus mandos, como bien lo dejo el General Cienfuegos, pero también es cierto que dentro del ejercito hay gente muy critica del gobierno. Yo he dado conferencias en el Colegio Superior de Guerra y he oído criticas muy fuertes al poder civil. En el fondo lo políticos tiene miedo a un golpe de estado. No saben como reaccionar con el ejercito, le tienen miedo, por eso todos son lisonjeros y superficiales. Todos en sus discursos siempre agradecen a la fuerzas armadas en un tono zalamero, monótono y formal.En cualquier caso, para que tentar a la suerte, es mejor crear mecanismos para sustituir al ejercito de las tareas de seguridad. Creo que desde el punto de vista de la ingeniería constitucional es mejor crear esos contrapesos.
La Gendarmería es una posibilidad, pero se ha tenido miedo de militarizarla, por la misma razón que aduje antes. Si, los políticos tiene miedo del ejercito, infundado o no. Es una realidad. Yo creo que esta es la vía. Que se fortalezca esta institución militarizada, si se quiere con mandos militares, pero con otros objetivos, con otro conocimientos, con otros mandos, con otra filosofía, pero con doctrina militar. El ejercito no sabe investigar delitos, el ejercito no solicita orden de aprehensión ni de cateo, ellos solo actuan y dan resultado y, por su propia naturaleza, aunque todos traigan cartilla sobre derechos humanos, como sostuvo el General Cienfuegos en una de sus entrevistas, su razón de ser es otra. se forman para la guerra, para la defensa del territorio nacional, aunque parezca verdad de perogrullo, no son policías, son soldados.
Y al final esta naturaleza es la que predomina en su actuación. De cualquier manera, aun con errores y excesos, la intervención del ejercito en estas tareas de combate al crimen organizado, impidió que nuestro país se convirtiera en un narco estado dominado por los capos, como sucedió en Colombia. Así que estoy convencido de la necesidad de su participación en el combate al crimen organizado; sin embargo he visto excesos. Los he observado interviniendo en temas de accidentes de trafico o de otra naturaleza, ciertamente no de manera generalizada, es tal vez el tono que le da cada comandante de zona le da a este apoyo. Esto me parece no es necesario.
De cualquier modo, gracias al ejercito y a la marina, hay zonas, como las de la frontera de Tamaulipas,que son habitables por su trabajo y compromiso, sino serian territorios totalmente en manos de la delincuencia.

jueves, 15 de octubre de 2015

! BRAVO GENERAL CIENFUEGOS, BRAVO!

Mi querido y ya desaparecido amigo y periodista baja californiano, Pepe Merino, siempre que se iniciaba un sexenio de gobierno, comentaba con preocupación, que el mas importante nombramiento de un Presidente, era el del Secretario de la Defensa, pensando Don Pepe, en la lealtad y la institucionalidad del ejercito, a través de ese nombramiento.
Hoy mas que nunca la preocupación del Sr. Merino es actual. Cuando Don Pepe hablaba de estos temas en finales de los 70, el narcotrafico y la violencia no eran problemas, ni en lo político ni en lo social ni en seguridad nacional. El ejercito participaba de manera rutinaria en lugares como Guerrero, Michoacan y Sinaloa, mas que nada para quemar plantíos de marihuana o amapola. Había critica, si, pero mas por su intervención, que algunos consideraban intimidatoria en las elecciones. En la actualidad el ejercito, obligado por las circunstancias de la violencia , del aumento del crimen organizado y la corrupción y falta de capacidad de la mayoría de las policías, tiene una presencia mas activa en todo el país, ya no solo en la búsqueda de plantíos o en el control de las armas de fuego, sino que en muchos casos sustituyendo a las policías municipales en la labor de prevención del delito, a las autoridades ministeriales en la persecución de los delitos federales, ademas de seguir cumpliendo las actividades propias de todo instituto armado. Estas actividades, que la verdad nadie quiere, ni ellos , los militares, han hecho que el ejercito mexicano sea mas expuesto a la critica, también a ser corrompido por las enormes sumas que la droga proporciona, que son pocos pero se han dado casos; a cometer exceso, que también los ha habido, por acción u omisión, como Llano de víbora, Tlataya o Ayotzinapa, o a asesinar civiles en los retenes, por error, si se quiere, por mencionar algunos temas. Esto ha ubicado a nuestro ejercito en las mira del análisis de propios y extraños. De manera normal, los secretarios de la defensa se abstienen de hacer declaraciones. Casi siempre sabíamos de su pensamiento a través de los discursos oficiales.
En el caso del General Salvador Cienfuegos, actual Secretario de la Defensa, la situación ha sido distinta. Quizá obligado por alguno de los casos arriba comentados o por la presión internacional que ha emitido varias recomendaciones para sacar al ejercito del combate a la delincuencia, ha abandonado las anteriores formas y con gran frescura ha dado varias conferencias a periodistas televisivos, quienes, independientemente que siempre fueron muy a modo y evitaron tocar termas candentes o contra pregunarle al Secretario de la Defensa, permitieron que el General Cienfuegos se expresara sobre tópicos difíciles y en otros tiempos prohibidos. Este, el General fue siempre mas allá de la pregunta y creo que respondió muchas de las interrogantes que muchos nos hacemos. Me gustaron sus respuestas y como las dijo. Pero lo que mas me gusto fue la forma en que salvo la gallardía y la dignidad de este gobierno y casi diría del estado mexicano, al responder a las pretensiones y recomendaciones de asesores y funcionarios internacionales. En efecto, primeramente los llamados expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, pusieron de rodillas al Gobierno del Presidente Peña al rechazar rotundamente la verdad histórica del Procurador Murillo en el caso Ayotzinapa.
Nadie defendió el trabajo de la PGR ni el Presidente ni Murillo que es tan salidor. Tanto trabajo, tantos esfuerzos de la PGR, de expertos austriacos y de otros países fueron demolidos con algunas lapidarias frases de los expertos, quienes ni siquiera presentaron su trabajo a las autoridades mexicanas, sino lo hicieron a la prensa. El Presidente, sin saber que hacer, de inmediato la acepto, sin ninguna recato, sin ninguna segunda reflexión; respondiendo directamente ademas, por un órgano del estado mexicano, el ministerio publico, que de entrada es independiente y autónomo al Presidente y su gabinete. Todo su gobierno temblor ante estas conclusiones. Después, tanto la Comisión Interamericana como el Alto comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas, hicieron pedazos toda la política de derechos humano de Mexico. Crisis de Derechos Humanos en todo Mexico sostuvieron temerariamente. Con sorpresa observe como el Secretario de Gobernación de Mexico era regañado y con timidez aceptaba los regaños. Quisieron hacer lo mismo con el ejercito y ahí toparon con pared. Con respeto y con energía el General Cienfuegos rechazo sus pretensiones de interrogar y regañar a nuestro instituto armado y les contesto que el únicamente respondía al Gobierno de Mexico y a sus autoridades legitimas. Bravo General. Hasta que alguien saco la casta. Durante tres semanas sufrimos los embates exagerados de los organismos internacionales y casi todos los funcionarios mexicanos lo aceptaron porque eran extranjeros los que hacian las recomendaciones. Si reconozco que estos organismos internacionales pueden actuar en nuestro país, debido a los tratados internacionales que hemos firmado, pero sus actos son solo recomendaciones, que admiten prueba en contra, pero, pareciera hay sentido de culpa y falta de a talento en los miembros del gobierno, se amilanaron ante estas acciones, salvo la Secretaria de Relaciones Exteriores,quien, aunque timidamente, rechazo el tono de las recomendaciones. Como bien dice una amigo, no es la mentada de madre, sino el tonito lo que molesta. Por eso, aplaudo la postura valiente e institucional del General Cienfuegos. Bravo general, bravo.